El empeño del pensamiento de Manuel Fraijó ha sido, desde sus inicios, -un prolongado forcejeo con la religión- para -intentar arrancarle sus mejores secretos-. En su diálogo abierto con la religión, desde una razón a la vez crítica y empática, busca responder a los interrogantes esenciales que desazonan al ser humano: el sufrimiento, el mal, la finitud y la muerte, el sentido y la luz de la existencia.
Las colaboraciones reunidas en este libro dan buena muestra de la fecundidad de esta constante y densa reflexión, que ha invitado e incitado a muchos, colegas o amigos, cercanos o distanciados, a pensar en la religión y a repensar la religión.