La filosofía mínima esà
Filosofía hecha desde una razón
enamorada de la vida.
Filosofía hecha de ideas breves
e intensamente concentradas, que caben
en una sola respiración.
Filosofía escultora que mancha las manos
con el fango emocional que habita las ideas.
´La realidad actual está llena de informaciones de todo tipo, todas ellas colocadas conjuntamente, sin criterios que ayuden a identificar y discriminar las más importantes de las superficiales. Entenderla es como jugar a leer ¿Dónde está Wally? Cuando miramos estos libros-juego, vemos los acúmulos de informaciones, estímulos, formas, colores que componen el conjunto de la imagen. Hay que descubrir a Wally en medio de todo aquello. Lo mismo ocurre cuando se trata de ubicarse en la realidad; hay que ser capaz de discernir qué es importante en medio del exceso epistemológico, moral, político, estético, etc. Hace falta aprender a ver los detalles y descubrir si en ellos está lo importante, lo imprescindible, lo esencial. Esto implica aprender a ver las mínimas expresiones, a descifrar las síntesis, a jugar a descubrir las pistas que conducen al entendimiento de la realidad y a la construcción de una visión del mundo que sea sostenible.
Este libro fue escrito con el objetivo de ser sutil, delicado e inspirador para quienes quieran aventurarse a jugar a pensar consigo mismos, con niños y jóvenes, y demás interesados. Por ello se trata de una filosofía mínima, que es una filosofía lúdica. Espero que la disfrutenà
Y como la filosofía lúdica es un movimiento, la parte B de este libro trae un manifiesto, también mínimo. Deseo que este manifiesto sea reproducido, centuplicado, multiplicado, vivido y disfrutado por todas las personas que pretendan gozar de su pensamiento y de su amor por la sabiduría.
Un filoabrazo.´
Angélica Sátiro