En la transfiguración, Moisés y Elías, aparecidos en forma gloriosa, hablaban del éxodo de Jesús que iba a cumplirse en Jerusalén (cf. Lc 9,30-31). Moisés y Elías son las figuras emblemáticas del Pentateuco y de los históricos del Antiguo Testamento. Hablan con Jesús de la esperanza de Israel, del «éxodo» que, a través del «mar Rojo» de la sangre derramada en la pasión, libera definitivamente de la esclavitud del pecado y conduce a la gloria.